He leído algunos artículos últimamente que me han gustado mucho y que comentaban lo que significa para la psicología de una mujer el hecho de convertirse en madre.
Uno de ellos hablaba de que la maternidad abre una caja de Pandora en el interior de la madre; salen de golpe y sin avisar todos los miedos, inseguridades, traumas, cosas que intentaba ocultar al resto del mundo y también los anhelos, esperanzas, comprensiones, perdones, paciencia, etc.
Al abrir esa caja de Pandora, algunas madres entienden a sus propias madres, otras se separan de ellas, otras las culpan o se culpan a sí mismas. El nacimiento de tu hijo te hace volver a nacer, de golpe eres otra vez como una bebé indefensa con todos los sentimientos a flor de piel y te sientes sin herramientas para superar eso.
Sin embargo todo pasa, si se consigue enfrentarse a los miedos infantiles, si se consigue recordar el propio dolor y perdonar y entender que nuestros padres lo hicieron lo mejor que pudieron (igual que nosotros), yo creo que la madre sale reforzada como persona.
Se reafirma en su personalidad, aumenta su confianza como mujer y como madre y aprende a ser paciente consigo misma, porque ella también está aprendiendo a gatear, a andar, a hablar y a todo.
Además, esas madres que se han enfrentado a si mismas como recién nacidas de nuevo, aprenden a separar lo importante de lo superfluo y se dan cuenta de que el amor, es lo único que realmente importa en este mundo.
;D estoy en ese proceso… me encantan estas palabras!!
Gracias Zarina! estoy impaciente por leerte sobre este tema 🙂
Besos
Pilar